Iglesia de la Aurora
La
iglesia de la Aurora, aparece unida a la plaza central de la
localidad que la sitúa en un emplazamiento de una estética y
presencia privilegiada. Su origen tiene relación al periodo de
pujanza de Grazalema en base a su industria textil a través de
alguna institución gremial de carácter religioso que respondieran a
una fundación para el rosario de la Aurora y la misa de alba de la
que queda fiel constancia en las inscripciones de su fachada. Como
figura en la misma, el templo fue construido entre los años 1769 y
1800 con la aportación de donaciones, diezmos y primicias del
pueblo. El proceso de construcción vivió varias etapas como
consecuencia de los efectos negativos del terremoto del 1 de
noviembre de 1755, el sitio y ataque de Grazalema por parte del
ejército napoleónico a comienzos del siglo XIX y las consecuencias
de la Guerra Civil en 1936. Fue concebida inicialmente como templo de
estilo barroco en su decoración y neoclásico en su arquitectura en
la que destaca, con respecto a las otras de planta de cruz latina de
la localidad, la novedad de su planta rectangular cuya cúpula, de
una belleza extraordinaria, aparece rematada con ocho lucernarios en
forma de estrella que completan el alzado en torno al que se le
añade, en el segundo cuerpo, una balconada circular a modo de coro
al que se accede a través de una escalera completamente cilíndrica.
El conjunto del edificio se completa con distintas dependencias del
templo así como el camerín de la Virgen de su altar mayor que posee
a su vez una cúpula con motivos geométricos de bella factura
rememorando sus vestigios barrocos. El resto de altares quedaron
desnudos después de 1936. El conjunto exterior de su edificio,
consta de una cúpula de forma octogonal cubierta con chapitel de
tejas y fachada de sillares de piedra caliza de gran sobriedad
solamente adornada con pilastras en las esquinas. La parte superior
aparece rematada por tres espadañas decoradas por pilastras, arcos
de medio punto y culminados con tres pináculos de abundante
ornamentación. Una joya arquitectónica en la que hay que recrearse
suficientemente por su originalidad constructiva y su capacidad de
ser un eslabón imprescindible del patrimonio artístico local.
No hay comentarios:
Publicar un comentario